Elegante caja joyero isabelina de aproximadamente 10 cm, realizada en bronce dorado con patas esféricas y cristales biselados en todas sus caras. Los cristales están decorados con delicados grabados de estrellas de ocho puntas, realizados a la rueda o al ácido, propios de mediados del siglo XIX.
Su tamaño la convierte en una pieza perfecta para coleccionistas de antigüedades románticas o como caja de presentación para joyas y objetos especiales.
Conserva la pátina original del bronce, lo que realza su autenticidad y encanto histórico.