(Seguramente, de principios del siglo veinte a partir de los estudios sobre modelos clàsicos del arquitecto noucentista Manuel Gausa Raspall) MIL SEISCIENTOS EUROS!!!!! (Se entrega con un baño de Xylazel anti-paràsito). Muy posiblemente el tallista fuese el célebre escultor religioso Marigó, con el que Manuel Gausa solía trabajar.