Escultura original de gres esmaltado – Campúa, 1969
Esta encantadora escultura de cerámica representa a un gato en reposo, con una expresión serena y casi mística que invita a la contemplación. Creada en 1969 por la artista M. Campúa, esta pieza única combina la fuerza del gres con la calidez del esmalte cerámico, dando como resultado una obra de gran presencia estética y material.
Dimensiones:
Ancho: 39 cm
Fondo: 22 cm
Alto: 29 cm
Peso: 8,6 kg
Técnica y materiales
El gres es una cerámica de alta temperatura (por encima de 1200°C), lo que le confiere una gran solidez y durabilidad. Esta técnica permite obtener acabados que combinan texturas orgánicas y ricas en matices, como se aprecia en el cuerpo del gato, con su superficie trabajada en espirales profundas y esmaltada en tonos rojizos brillantes. El rostro, en contraste, está delicadamente suavizado con un esmalte claro que realza la expresión plácida y ornamental del animal.
El esmalte cerámico, aplicado sobre la pieza ya cocida, se vitrifica durante una segunda cocción, generando un acabado resistente, con brillos naturales y sutiles variaciones cromáticas que enriquecen visualmente la obra.
Para quién es esta pieza
Ideal para amantes del arte cerámico, coleccionistas de escultura contemporánea o decoración de interiores con personalidad. Esta obra es perfecta para dar un toque artístico, cálido y sofisticado a cualquier espacio: desde un salón con carácter hasta un rincón íntimo que invite al descanso.
Pieza única con historia
Firmada por Campúa y fechada en 1969, esta escultura no solo es una obra de arte, sino también un testimonio de la exploración artística en cerámica de autor durante la segunda mitad del siglo XX.