17,7 x 13,3 es el tamaño total; parece que el cartón haya sido recortado por arriba (o no).
En cualquier caso, es una foto de comunión diferente. El resto de hermanos o primos se disfrazan para completar un retrato infantil de familia, es muy original, es alegre y teatral, rompe con la frialdad y seriedad habitual de las fotos de comunión de la época, que repiten el modelo "niño/reclinatorio". Quien diseñó la escena tiene la visión de un fotógrafo o un pintor; en mi opinión.
El original está bien enfocado y tiene buena definición en los rostros.
Reverso liso y limpio, sin datos.