El buceador Álex Vinaroz encuentra a través de unas inusuales burbujas en la ensenada de Puerto Calderón, en Cantabria, un submarino semihundido. Pese a tratarse de un U-Boot de la Segunda Guerra Mundial, descubre que su contenido no es militar. Por otro lado, un buque cazatesoros inglés de bandera de Bahamas, el Dauntless, se acerca a la costa de Cantabria. Tras años de investigación ya tiene casi acotada la zona en que ha de encontrarse el submarino.