En 1910 llega a Esmirna, la angitua ciudad de Anatolia, Esma, una viuda que compra una mansión a cambio de su anillo de Zafiros. Allí cría a sus gemelos, Cadri y Aladdin, y se enamora apasionadamente de Suleimán, un amor imposible, pues el hermano mayor de Esma, Iskender, no está dispuesto a tolerar su unión.