Un mundo desmesurado, poblado de grandes peligros, animales salvajes, caracteres indómitos y pasiones incontrolables, y en el que reinan los valores románticos primitivos de la\n\nlealtad, la amistad y el coraje. Situando la acción en paisajes exóticos Malasia, el Caribe, el Oeste americano y anclándola en la verosimilitud por medio de pinceladas históricas y naturalistas, apeló a la imaginación juvenil con novelas tan apasionantes como LOS TIGRES DE MOMPRACEM, en la que encontramos las legendarias\nfiguras de Sandokán, Mariana, Yáñez y James Brooke, con el contrapunto del despechado barón William.