Mortadelo y Filemón en Maastricht La T.I.A. envía a Mortadelo y Filemón a Maastricht para proteger el Tratado que dará origen a la Unión Europea. Como siempre, los dos agentes provocan un caos absoluto: Mortadelo se disfraza de diplomático y acaba firmando un tratado que prohíbe los bocadillos de chorizo, mientras Filemón, intentando arreglarlo, tropieza y lanza todos los documentos al río Mosa. Al final, tras mil persecuciones, disfraces y tortazos, logran "salvar" el tratado... aunque con tantas modificaciones accidentales que Europa tarda décadas en entender qué firmaron.