El 19 de julio de 1909, Elsie Thornton, la niñera de los señores Desvalls, aparece muerta flotando en las aguas del lavadero mayor el día siguiente a la recepción que se celebró en el parque del Laberinto de Horta, en la finca familiar. Al tratarse de una ciudadana británica, Ossorio, el gobernador, ordena a Ignasi Requesens que sea él, junto a su inseparable Cristóbal, quien se encargue de la investigación.