Antigua cámara Kodak Rainbow Hawk-Eye No. 2A Modelo B negra, USA, 1930-1933
Magnífica cámara Kodak Rainbow Hawk-Eye No. 2A Modelo B, producida por la Eastman Kodak Company en Rochester, Nueva York, entre 1930 y 1933. Esta pieza pertenece a una de las series más elegantes y representativas del periodo de transición entre la fotografía amateur y la fotografía de viaje de comienzos del siglo XX. La gama Rainbow Hawk-Eye se ofrecía en distintos colores, y aunque la versión negra, como la que aquí presentamos, fue la más sobria, destaca hoy por su atractivo atemporal y su excelente equilibrio entre estética y funcionalidad.
Construida en metal con fuelle de cuero negro, mantiene una estructura plegable sólida y perfectamente conservada. Equipada con un obturador Kodak Rainbow Hawk-Eye con velocidades T y B, 25 y 100, y con un objetivo Kodak Anastigmat f/6.3 de 128 mm, esta cámara permitía captar imágenes nítidas en formato 116, produciendo negativos de 6,5 × 11 cm, ideales para paisajes o retratos. Su diseño compacto, apenas 20,5 cm de alto y 9 cm de fondo al desplegarse, y la carcasa texturizada la convirtieron en la compañera perfecta de fotógrafos aficionados y viajeros elegantes durante los años 30.
Este ejemplar conserva todos sus componentes originales, sin reparaciones ni sustituciones. El fuelle se encuentra en excelente estado, sin grietas ni fugas de luz, y la mecánica del obturador responde correctamente en todas las posiciones, aunque no se ha probado con película. Las partes metálicas presentan un brillo uniforme y el visor mantiene su alineación. Se trata de una cámara completa, sin funda ni manual, pero con una pátina natural que evidencia un uso cuidadoso y el paso de un siglo de historia.
La ventana trasera con cristal rojo, característica del modelo, permitía controlar el avance del carrete 116, un detalle funcional y distintivo de las cámaras de su época. Su elegante acabado negro, menos buscado en su día, ha ganado hoy en interés por su rareza discreta y su belleza sobria.
Es una pieza que combina historia, diseño y técnica en proporciones equilibradas, perfecta para destacar en una vitrina, en una estantería de estudio o como acento decorativo en cualquier ambiente vintage. Su excelente conservación y su mecánica íntegra la convierten también en una opción de colección sólida y con proyección de valor.
Una cámara con alma y carácter, testigo fiel de una época en la que la fotografía comenzaba a hacerse verdaderamente portátil. Ideal para quienes aprecian los objetos con historia y la calidad artesanal de Kodak.
Medidas: 20,5 cm × 9 cm (8 × 3,54 in).
Historia de la Kodak Rainbow Hawk-Eye No. 2A
La serie Rainbow Hawk-Eye fue introducida por Eastman Kodak Company a comienzos de la década de 1930 como evolución de las populares cámaras Hawk-Eye Folding. Se fabricaron en una amplia gama de colores de las cubiertas exteriores: azul, rojo, verde, marrón, marfil y negro. Fabricadas principalmente en Rochester (Nueva York), estas cámaras fueron diseñadas para el público aficionado que deseaba resultados de calidad profesional en un formato manejable.
El modelo No. 2A Folding Model B utilizaba película tipo 116, produciendo negativos de 6,5 × 11 cm. Su diseño plegable permitía que el cuerpo metálico sirviera a la vez de carcasa protectora y soporte de exposición, un adelanto técnico en su momento. Incorporaba el obturador Rainbow Hawk-Eye, con velocidades variables y disparo mediante palanca frontal, y una gama de objetivos que variaban entre los sencillos meniscus y los más avanzados Kodak Anastigmat f/6.3.
Aunque la mayoría de las cámaras Rainbow se ofrecían en colores vivos, el acabado negro, como el de este ejemplar, era una opción sobria destinada a quienes preferían la elegancia clásica frente a la moda colorida de la época.
Entre 1930 y 1933 la serie Rainbow Hawk-Eye representó el cierre de una era en la historia de Kodak: la última generación de cámaras plegables antes de la llegada masiva de los modelos de 35 mm. Su durabilidad mecánica y su belleza formal han hecho de ellas un objeto de culto entre coleccionistas y amantes de la fotografía histórica.