Para Perez de Ayala, la vida es una tragicomedia. Pocas afirmaciones repetira con tanta frecuencia y rotundidad. Lo comico y lo tragico no se excluyen sino que coexisten y se complementan. Una persona o una situacion pueden ser, a la vez, profundamente serios y realmente comicos (...). Por el camino del humor y la ironia, en cambio, se alcanza la seriedad verdadera y la cabal comprension del mundo. (De la Introduccion de Andres Amoros)