La savia creadora de R. L. Stevenson (Jamaica 1850-1894) puede disfrutarse nuevamente con el libro A la luz de una linterna que, publicado por Cuatro Ediciones, recupera 18 relatos del escritor. El libro, según sus editores, no trata de secuestros, ni de ladrones de cadáveres, ni de médicos desdoblados en asesinos. El volumen revela 'el talento de Stevenson en estado puro, que en sus novelas resulta, a veces, velado por la intriga trepidante y la imponente presencia de sus héroes y canallas'.
A la luz de una linterna revela el don de recrear el esplendor de la existencia por parte del autor de La isla del tesoro. A lo largo de estos 18 relatos, Stevenson ilumina para el lector vacaciones infantiles y vidas de ingenieros, faros y otros paisajes isleños, sueños secretos o encendidas conversaciones en un Edimburgo fantasmal con sus teatros y bazares. En su singular manera de mezclar anécdotas y honduras, ásperas verdades y continuos entusiasmos, vibra el pulso de la vocación literaria del autor, así como la sinceridad autobiográfica más generosa y honesta.
Según la editorial vallisoletana Cuatro Ediciones existe una gran deuda con el escritor, 'puesto que no hay una edición completa de sus escritos', que, además, 'se ha visto agravada por los continuos saqueos o recortes a que ha sido sometida su impagable literatura'.