Relato de las aventuras de Durrell durante una expedición en Camerún, donde buscaba animales para su zoológico. Con su inconfundible sentido del humor británico, el autor narra encuentros con funcionarios coloniales, tribus locales y animales exóticos, entre ellos los entrañables y caóticos sabuesos. Una obra deliciosa que combina divulgación naturalista, anécdotas absurdas y defensa del respeto a la biodiversidad. Ligera, inteligente y muy divertida.