Verónika, una joven de veinticuatro años, parece tenerlo todo - juventud y belleza, pretendientes, una familia amorosa, y un empleo que la satisface. Pero le hace falta algo en su vida. Así es como en una fría mañana invernal de noviembre, Veronika decide morir. Se toma un puñado de píldoras para dormir esperando no despertarse jamás. Pero se despierta- en un hospital para enfermos mentales donde le avisan que sólo le quedan pocos días de vida. Esta novela, basada en eventos de la propia vida de su autor, cuestiona el significado de la locura, y celebra a los individuos que no encajan en los patrones que la sociedad considera normales.