Apenas hay descanso para el padre Di Stéfano, héroe arquetípico donde los haya; miembro de una muy renovada Iglesia Católica, su trabajo es, en resumen, el de agente secreto. Pero este agente secreto se ve envuelto en una conspiración que amenaza directamente los cimientos de la Iglesia y, para resolver el problema, es requerido por una facción de los conspiradores que le enviará a un lejano planeta donde, además de encontrarse con un panorama estremecedor, descubrirá que además de la conspiración hay veladas mentiras, intrigas y traiciones en las que él mismo es una pieza más de un juego el que no querría haberse embarcado