Durante los días 11 y 12 de mayo de 1931, Málaga vivió horas de angustia y desorden en lo que se denominó la quema de los conventos. La pastoral promonárquica del cardenal Segura del 2 de mayo de 1931, y los sucesos del 10 de mayo en Madrid, provocaron el estallido anticlerical de Málaga al día siguiente. Las masas se lanzaron a la calle de forma incontrolada y se produjeron saqueos e incendios de iglesias, conventos y colegios religiosos. Una de las parroquias más afectadas fue la de Santo Domingo, donde se veneraban valiosísimas imágenes religiosas, destacando sobre todas ellas el Cristo de la Buena Muerte, de Pedro de Mena y Medrano, considerado por los expertos como uno de los mejores crucificados de la historia del arte en Europa. Aquella noche del 11 de mayo fue la última en la que se vio la referida talla que, tras sufrir todo tipo de agresiones, fue desclavada y tirada al suelo para destruirla, pero lo cierto es que nadie vio cómo se quemaba y, además, no hubo rastro de sus cenizas.
TAPA BLANDA CON SOLAPA
Tiene una medida de 21x15 cm y un peso de 486 gr