Magnífica obra del pintor Luis Casanova, reconocido artista español de la segunda mitad del siglo XX, muy valorado por sus escenas urbanas y costumbristas. El cuadro representa una escena de calle europea, con un vendedor ambulante, una niña y detalles arquitectónicos propios del siglo XIX. La composición transmite un ambiente nostálgico y realista, con gran atención al detalle en edificios, empedrado y figuras.