En el Estocolmo de 1793, tras la muerte del rey Gustavo III, la tensión política se palpa en el ambiente. En este contexto, Mickel Cardell, un veterano de guerra, descubre un cuerpo mutilado en un lago. Cecil Winge, un abogado tuberculoso, se encarga de la investigación, pero su salud precaria y las revueltas complican el caso. Juntos, Winge y Cardell se adentrarán en un mundo de corrupción y crímenes para descubrir la verdad tras este terrible suceso. Una novela intensa y febril que sumerge al lector en las calles y rincones más oscuros de la capital sueca a finales del siglo XVIII.