A Fortunate Life es la autobiografía de Albert Facey, un australiano que vivió una vida marcada por la adversidad y la resiliencia. Nacido en 1894, Facey creció en la zona de Kalgoorlie y trabajó desde joven en diversos oficios. Luchó en la Primera Guerra Mundial, incluyendo la campaña de Galípoli, y más tarde se dedicó a la agricultura. A pesar de las dificultades económicas y personales, Facey mantuvo una actitud positiva y una profunda conexión con su familia y su país. Su historia es un testimonio de la fortaleza del espíritu humano y una valiosa mirada a la historia de Australia.