En esta novela autobiográfica, Joachim Meyerhoff narra con humor y sensibilidad su experiencia al mudarse con sus abuelos en Múnich mientras estudia en la escuela de actuación. La vida en la villa de sus abuelos, llena de rituales excéntricos y personajes singulares, contrasta con la intensidad de su formación actoral, creando un relato conmovedor sobre la búsqueda de identidad y la aceptación de las imperfecciones.