Agnes Grey es la hija de un pastor con escasos ingresos y de una dama de la alta sociedad que renunció a sus privilegios por casarse por amor. Cuando la familia atraviesa graves problemas económicos, Agnes se ofrece para trabajar como institutriz. A través de su trabajo, Agnes conocerá estilos de vida muy diferentes del que ha vivido en su tranquilo y amoroso círculo familiar. Esta novela es una revelación del precario estatus de la institutriz, un relato íntimo de esfuerzo y humillación, y de defensa del mundo interior y de la integridad moral. Presenta un retrato de la durísima situación con la que se encontraban las institutrices, mujeres con una amplia educación, pero que no podían acceder a ningún otro trabajo.