En esta exhortación apostólica, el Papa Francisco nos invita a reflexionar sobre la santidad en la vida cotidiana. Nos recuerda que Jesús nos llama a la verdadera vida y felicidad, especialmente a través de las Bienaventuranzas. Este documento busca inspirar a los hombres y mujeres de hoy a encontrar un sentido trascendente en sus vidas, siguiendo el camino de fe y esperanza.