Evie está encantada cuando le regalan a Alfie, su propio cachorro. Alfie adora a Evie: le encanta que lo abracen, duerme en su cama y la recibe cada día al volver del colegio moviendo la cola. Pero no pasa mucho tiempo antes de que llegue otro nuevo miembro a la familia: Sam, el hermano pequeño de Evie. De repente, nadie tiene mucho tiempo para cuidar de Alfie, y mucho menos para jugar con él y sacarlo a pasear, y pronto se encuentra no deseado y solo...