A los 35 años, Mitsuo Kawano trabaja como editor en una publicación cultural mientras espera fundar su propia revista de Historia. Hace tiempo que dejó de tener relaciones sexuales con su pareja y frecuenta salones eróticos. Un día se cruza con Gorô Kida, un excompañero que se ha convertido en el presidente de una importante empresa, y con él asiste a un selecto club donde encuentra a una antigua amiga de la escuela, la misteriosa Mitsuko, su primer amor. El encuentro con Mitsuko, a quien llama Azami, como la flor del cardo, despierta en él una pasión inesperada y revive sus deseos de juventud.