En Bloodline, la octava entrega de la serie Tom Thorne del autor Mark Billingham, un cuerpo es descubierto en un piso del norte de Londres con una lasca de radiografía en la mano. El detective inspector Thorne descubre que la madre de la víctima fue asesinada quince años antes por el infame asesino en serie Raymond Garvey. A medida que se descubren más cuerpos, Thorne debe desentrañar un macabro rompecabezas para proteger a los hijos de las víctimas de Garvey de un nuevo asesino.