En el verano de 1967, el sol ilumina Bondrée, un lago fronterizo rodeado de bosques, donde Zaza Mulligan y Sissy Morgan bailan hula-hop en la arena. La tranquilidad se ve interrumpida cuando Zaza desaparece, sembrando la angustia entre los vecinos. La trama se complica con la desaparición de Sissy, llevando al inspector Michaud a investigar los secretos ocultos en el bosque. Andrée A. Michaud, reconocida por su estilo de novela negra, teje una historia inquietante sobre las repercusiones de la violencia en una comunidad.