Caricia de carmín es una novela escrita por Éric Fottorino y traducida por Cristina Zelich Martínez. La historia se centra en Félix Maresco, un hombre cuya vida da un giro inesperado tras la trágica pérdida de su hijo. La novela explora temas de identidad, género y la búsqueda de la ternura en situaciones inusuales. La narrativa se desarrolla en París, donde Félix trabaja en una compañía de seguros y se enfrenta a recuerdos dolorosos que lo llevan a tomar decisiones sorprendentes.