En el año 6112, la humanidad vive en cuatro burbujas gigantes diseminadas por el planeta, creyendo que fuera de ellas solo existe un mundo hostil y deshabitado. Sin embargo, cerca del río Misisipi, una tribu de cheyenes lucha por sobrevivir, enfrentándose a peligros naturales, enfermedades y tabúes. Los habitantes de las burbujas, ajenos a la guerra y creyéndose en posesión de la sabiduría, ven su sistema de vida amenazado por un suceso aparentemente trivial. ¿Podrán Reseda y su padre detener el cataclismo, o la desaparición del género humano es inevitable? Esta novela de ciencia ficción aborda temas ecológicos y de supervivencia en un futuro distópico.