Tras la trágica muerte de su esposa e hijas, John Stapleton se convierte en médico forense en Nueva York, esperando poco de la vida. Sin embargo, una serie de muertes inexplicables lo sacuden de su indiferencia: pacientes mueren a causa de virus erradicados hace mucho tiempo, como la peste. Todos fueron tratados en hospitales administrados por la poderosa compañía de seguros Americare, a quien Stapleton culpa por la quiebra de su propia práctica de oftalmología. El encuentro con Terese, una publicista encargada de una campaña para el principal competidor de Americare, lo impulsa a investigar el origen del mal. Juntos, descubren un plan de horror inhumano. Robin Cook, él mismo un ex cirujano y oftalmólogo, nos presenta una guerra despiadada donde el entorno hospitalario, obsesionado con la rentabilidad, no duda en recurrir al crimen organizado. Un thriller de suspense que también es una advertencia sobre los peligros de una medicina sometida a la ley del beneficio.