En la Inglaterra de 1890, Nell Reece, una joven embarazada y sola, se ve obligada a abandonar a los hombres de su vida, creyendo que nunca podrá regresar. Con poco más que la ropa que lleva puesta, viaja por la campiña de Bedfordshire. En su camino, se encuentra con Kit, un huérfano de diez años que ha vivido toda su vida en las calles, y decide acogerlo bajo su protección. Juntos, se hacen amigos inseparables, sin saber a dónde les llevará su viaje, pero conscientes de que llegará el momento en que tendrán que rendir cuentas.