Este libro explora la relación entre el cristianismo primitivo y la cultura griega (paideia). Werner Jaeger analiza cómo la expansión de la cultura griega facilitó el surgimiento del cristianismo como religión universal. Examina la controversia entre paganos y cristianos en los siglos II y III, culminando con la síntesis del pensamiento griego y cristiano representada por los padres griegos del siglo IV.