Este es un libro de psicología y espiritualidad para niños, que les enseña que Dios es alguien con quien pueden compartir sus sentimientos en cualquier circunstancia. A través de ilustraciones y textos sencillos, los niños aprenden a rezar cuando están enfadados, tristes, aburridos o se sienten estúpidos. El libro busca ayudar a los padres y educadores a compartir su fe con los niños, fomentando una vida de fe reconfortante.