En 'El hombre que compró un automóvil', Wenceslao Fernández Flórez nos presenta una sátira sobre la creciente obsesión por los automóviles y cómo estos dominan nuestras vidas. A través de una narrativa irónica y caricaturesca, el autor explora un mundo donde los coches se han convertido en una parte integral de la sociedad, hasta el punto de influir en el comportamiento humano y las relaciones interpersonales. La historia, ambientada en una época donde la civilización del automóvil estaba en su apogeo, ofrece una reflexión sobre la dependencia tecnológica y la pérdida de la individualidad en un mundo cada vez más mecanizado.