En el verano de 1984, tres niños se adentran en el bosque de Knocknaree en Dublín, pero solo uno regresa, incapaz de recordar lo sucedido. Veinte años después, ese niño, ahora detective de homicidios llamado Rob Ryan, se enfrenta a un caso escalofriante: el cuerpo de una niña es encontrado en el mismo bosque. Rob deberá desentrañar los secretos del pasado para resolver el presente, enfrentándose a sus propios demonios y a la oscuridad que acecha en el silencio del bosque. Una novela de suspense que te mantendrá en vilo hasta la última página.