Julieta y su madre llegan a La Sabina para pasar las vacaciones. A sus once años, esa aldea perdida le parece el mejor lugar para dejar atrás problemas a los que no sabe poner nombre. Ese verano eterno lleno de primeras veces, descubrirá que los cimientos del pueblo están hechos de secretos y recuerdos; los lindes del bosque, de cuentos y leyendas; y el corazón de las personas, de miedo, odio, amor y esperanza, los cuatro sentimientos que nutren sus sueños y también sus peores pesadillas. Elvira Lindo regresa a la pura ficción creando un territorio literario propio, la despoblada Sabina y sus bosques, un escenario en el que realidad y fábula se dan la mano, como en los cuentos clásicos. El lector que se adentre en él se verá inmerso en una novela magnífica, de intensidad creciente, ante cuyo misterio sólo podrá responder con asombro y emoción.