En julio de 1976, en un Londres sofocante, la atmósfera en casa de los Riordan es tensa. Robert, el padre, desaparece sin previo aviso, dejando a su esposa, Gretta, desconcertada. Reunidos en torno a su madre, los hijos intentan reconstruir lazos distendidos y comprender la situación. ¿Podría su desaparición ser la clave de un misterio familiar aún mayor, protegido durante años? Maggie O'Farrell traza con delicadeza y precisión el retrato de una familia que se asfixia bajo el peso del calor y los secretos, entre Londres, Nueva York y un pueblo de Irlanda.