En 'Fault Lines', Raghuram Rajan argumenta que los fallos graves en la economía también son culpables de la crisis financiera global. Advierte que una crisis potencialmente más devastadora nos espera si no se solucionan estos fallos. Rajan muestra cómo las elecciones individuales que colectivamente provocaron la crisis económica fueron respuestas racionales a un orden financiero global defectuoso, donde los incentivos para asumir riesgos están desalineados con los peligros que esos riesgos representan. El autor expone un sistema donde la creciente desigualdad de Estados Unidos y la delgada red de seguridad social crean una tremenda presión política para fomentar el crédito fácil y mantener la creación de empleo robusta, sin importar las consecuencias para la salud a largo plazo de la economía.