Después de que un tablón de anuncios le cae encima a Stanley mientras duerme, descubre que estar plano tiene sus ventajas. Puede volar como una cometa, ser enviado de vacaciones por correo y usar sus nuevas habilidades especiales para atrapar a unos ladrones de arte. Aun así, se alegra cuando su hermano Arthur piensa en usar la bomba de bicicleta para inflarlo de nuevo a su forma normal. Este libro es ideal para niños a partir de 3 años.