Prisionero de los recuerdos. Memorias de un médico cubano. Estos son relatos amenos, interesantes y refrescantes que logran atrapar la atención del lector tanto por su aspecto anecdótico como en su contenido humano. Su brevedad impide que nos fatiguen y aunque nos encontramos ante historias médicas, en ningún momento la terminología especializada nos abruma. La prosa empleada cumple en forma cabal sus funciones dentro del objetivo que se ha propuesto el autor, que es transmitirnos en forma agradable sus experiencias.