Este libro en dos volúmenes narra la historia del pontificado de Juan Pablo II desde 1978 hasta 2005. A través de fotografías y textos, se presenta un recorrido por los momentos más importantes de su papado, ofreciendo una visión completa de su legado y su impacto en la Iglesia Católica y en el mundo. Una obra imprescindible para comprender la figura de uno de los líderes religiosos más influyentes del siglo XX.