Este libro de Norberto Alcover ofrece una profunda contemplación del pontificado de Juan Pablo II, repasando los momentos eclesiales más significativos. El autor presenta una herramienta para valorar la riqueza y responsabilidad de este tiempo, definido por un Papa admirado y discutido tanto dentro como fuera de la Iglesia. Una obra esencial para comprender el legado de Juan Pablo II en la historia de la Iglesia.