Este libro de Gottfried Fliedl explora la vida y obra de Gustav Klimt, uno de los artistas más destacados del movimiento modernista vienés. A través de sus páginas, se analiza la evolución artística de Klimt, su fascinación por la figura femenina y su papel en la Secesión de Viena. El libro ofrece una visión completa de su legado, contextualizando su trabajo en el ambiente cultural y social de su época.