En la Sevilla de 1480, los cristianos viejos buscan eliminar a los falsos conversos mediante la creación de una inquisición castellana. La llegada de la bula papal desata la emoción en la ciudad, marcando un punto de inflexión. Rosana Sosan, hija de un adinerado judío converso, se enamora de Juan de Mendoza, hijo del alguacil mayor. Sin embargo, Juan la traiciona, induciéndola a acusar falsamente a su padre de traición a la Corona y a la Iglesia, prometiéndole matrimonio y amor eterno. Con la Inquisición establecida, la herejía se castiga con la hoguera. Al descubrir el engaño, Rosana decide vengarse, transformando su vida y la ciudad de Sevilla para siempre.