Este libro explora la tradición de la hospitalidad en los monasterios de Castilla y León, España. Analiza la historia y las prácticas de acogida de huéspedes en estos lugares religiosos, destacando su importancia cultural y social a lo largo del tiempo. El autor, A. García Simón, ofrece una visión detallada de cómo los monasterios se convirtieron en centros de acogida y refugio para viajeros y peregrinos en la región.