En el reino, un mal misterioso está causando estragos. En el templo de Abydos, el acacia, el "árbol de la vida" que simboliza al dios de la resurrección de Egipto, está muriendo. Con él, el poder de los faraones se desvanece: la autoridad del joven monarca Sésostris III es cuestionada por los jefes de provincia. Incluso en su palacio de Memphis, los traidores trabajan en secreto para destruirlo. Desesperado, Sésostris no puede luchar contra un enemigo invisible. Sin embargo, un hombre sabe qué desgracia le espera al antiguo Egipto. Él es quien ha desatado la ira de Seth, el dios malvado rival de Osiris. Se hace llamar el Anunciador y levanta a las tribus del desierto contra Sésostris. Sus discípulos anuncian por todas partes el comienzo del reinado de Isefet, el poder del mal. Llegan noticias alarmantes de Sichem. La lucha entre las fuerzas del bien y del mal acaba de comenzar.