L'Eternel Fiancé es una novela de Agnès Desarthe que explora la vida a través de momentos significativos. La narradora recuerda eventos como una declaración de amor infantil, un reencuentro invernal en París, un rock'n'roll acrobático, la muerte de una madre, una exposición de arte, una boda ficticia, un día de verano en el campo y la vida secreta de un gigoló. Estas escenas capturan la esencia de una existencia que, de otro modo, se perdería en el olvido. La novela destaca la importancia de escribir para preservar los recuerdos y presenta una visión vitalista y conmovedora de la vida.