En 'L'Homme qui était mort', el Salvador, quien predicó mucho y vivió poco, resucita lleno de decepción. Lleno de amargura, con el alma apagada, parte en busca de la verdadera vida, de ese impulso vital, tan querido por Lawrence, que ignoró en su primera estancia en la tierra. Esta edición de Gallimard presenta la obra en francés, manteniendo la esencia y el estilo del autor.