Este libro aborda la situación de la salud en México desde una perspectiva social, económica y cultural. Analiza detalladamente la relación entre las condiciones de desigualdad social y las disparidades en los indicadores de salud, así como las inequidades en el acceso a los servicios. Además, presenta las transformaciones demográficas y epidemiológicas de las últimas décadas y discute los desafíos que estos cambios representan para el país. La obra destaca la importancia de la pobreza, la desigualdad y la precariedad laboral en los perfiles de enfermedad y muerte de los mexicanos.