En el corazón del Lutetia, un hombre observa cómo Europa se sume en la guerra. Edouard Kiefer, un ex policía alsaciano, es el detective encargado de la seguridad del hotel y sus clientes. Discreto e intocable, nadie sabe lo que piensa. En un París derrotado, ocupado y humillado, durante los oscuros días de la colaboración, este hombre se enfrenta a una pregunta constante: ¿hasta dónde se puede llegar sin traicionar la propia conciencia? Desde 1938 hasta 1945, el hotel Lutetia, el único palacio en la margen izquierda, comparte el destino de Francia. Entre sus paredes, se suceden exiliados, escritores y artistas, seguidos por oficiales nazis y traficantes del mercado negro, para finalmente dar paso a los deportados que regresan de los campos. Pierre Assouline revive la leyenda perdida del gran hotel con una precisión biográfica y un aliento romántico, utilizando un arte del claroscuro que se adapta perfectamente al mítico Lutetia.