En el futuro multicultural de Noruega, la detective Marion, una madre adolescente divorciada, forma parte de un equipo de investigación diverso. El equipo se enfrenta a un caso inusual: el cuerpo de una joven de origen pakistaní aparece en un contenedor, vestida con un sari y un hiyab, sin la mano izquierda. La víctima, llamada Nasreen, no solía usar velo y tenía un novio noruego. Esta es la premisa de una intensa búsqueda de un asesino en serie, donde Marion y sus colegas deben cuestionar sus prejuicios mientras descubren más asesinatos. La investigación toma un giro inesperado cuando el propio equipo es investigado. La novela explora temas de prejuicio, pensamiento convencional y crítica cultural.